Salmos 100:2-5

Servid al SEÑOR con alegría; venid ante El con cánticos de júbilo.
Sabed que El, el SEÑOR, es Dios; El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos;  pueblo suyo somos  y ovejas de su prado.
Entrad por sus puertas con acción de gracias, y a sus atrios con alabanza.
Dadle gracias, bendecid su nombre. Porque el SEÑOR es bueno; para siempre es su misericordia, y su fidelidad por todas las generaciones.
(Salmos 100:2-5 LBLA)

Deportes: Día sin complicaciones
Búsqueda personalizada